Ultrasonido endoscópico

El ultrasonido-endoscopico (USE) combina la técnica del ultrasonido y la endoscopía para obtener información e imágenes de la pared del aparato digestivo, así como de los tejidos y órganos circundantes.
Esta combinación de técnicas es muy interesante. Al poder introducir el transductor del utrasonido dentro del cuerpo, nos permite colocarlo muy cerca del área que es de interés estudiar, con lo cual la fineza de imágenes es mucho más detallada que con el ultrasonido convencional, lo que permite un diagnóstico mucho más certero y preciso.
¿En qué consiste el estudio?
El ultrasonido-endoscópico se realiza de forma similar a una endoscopía de tubo digestivo, es decir, consiste en pasar un tubo flexible y delgado (endoscopio) a través de la boca o ano del paciente. Un pequeño transductor de ultrasonido localizado en la punta del endoscopio produce ondas de sonido que crean imágenes de los tejidos adyacentes.
Existen dos tipos de ultrasonido-endoscópico: Uno utiliza un transductor que genera una imagen radial de 360 grados, y le otro es un transductor lineal que utiliza ultrasonido doppler para diferenciar estructuras sólidas de vasos sanguíneos. Este último permite realizar biopsias de ganglios linfáticos y tumores mediante una aguja de aspiración fina; hace posible el drenaje de colecciones líquidas abdominales (quistes y pseudo quistes pancreáticos) y puede realizar bloqueos nerviosos para manejo del dolor.
Al ser un procedimiento muy efectivo y de invasión mínima se considera una mejor alternativa a los procedimientos quirúrgicos.
¿Cual es su utilidad?
Para estadificar o evaluar la extensión de tumores gastrointestinales y del mediastino incluyendo: cáncer de esófago, estómago, recto, páncreas e hígado.
El ultrasonido endoscópico puede determinar con precisión la profundidad de invasión tumoral en cada una de las capas de la pared del órgano afectado y con ello poder precisar cuál es el método de tratamiento más adecuado (resección endoscópica o quirúrgica).
Examina el tamaño, forma y apariencia de ganglios linfáticos adyacentes, determinando si el cáncer se ha extendido a éstos. Permite tomar biopsias para confirmar histológicamente el diagnóstico.
Puede detectar piedras biliares con mayor precisión que el ultrasonido convencional, colangio resonancia y la colangio pancreatografía retrógrada endoscópica.
Evalúa masas submucosas y pliegues engrosados en el tracto digestivo para investigar la presencia de cáncer o tumores benignos localizados en las diferentes capas de la pared.
Investiga enfermedades de otros órganos internos, como el páncreas (pancreatitis crónica, quistes, tumores benignos y cáncer).